Edmund Tarbell

Si deseas comprender la vida, deja de creer lo que la gente dice y escribe y, por el contrario, observa y piensa. (Anton Chéjov)
La vida es fascinante, sólo hay que mirarla a través de las gafas correctas. (Alexandre Dumas)
Es curioso que la vida, cuanto más vacía es, más pesa. (León Daudi)


viernes, 13 de julio de 2007

NATALIA

Óleo de Berthe Morisot

















Oh, mi niña...
Mi dulce Natalia...
Luz de blanca luna sube a tu mirada

y en ella refleja toda la belleza
que tiene tu alma.

¡Qué bonita eres!

Siempre tan alegre, tan linda.
Eres el premio a mi vida, hija.
Mi remanso de paz.
La suave brisa que alivia mi alma.


¡Qué bonita eres!

Ojos verde mar, manitas de nácar,
rodéame con tus brazos
si ves que mis ojos algún día lloran.


¡Qué bonita eres!

Y ahora, duerme, corazón de mamá.
Duerme ya, mi niña.
Oh... No me niegues nunca esa sonrisa...
¡Mi pequeña vida!
¡Hija de mi alma!



  Maite García Romero